07 junio 2008

LA SANIDAD CANARIA(PP)
A LA CABEZA
EN CUIDADOS DE PALIATIVOS


Salamanca, 4 jun. (EFE).- Cataluña, Extremadura y Canarias son las comunidades más avanzadas en la atención a enfermos terminales en unidades de cuidados paliativos, tanto domiciliarias como en los hospitales, ya que cuentan con mayor experiencia en la materia, con personal muy especializado y con más medios económicos que otras.

Así lo ha subrayado en declaraciones a EFE el doctor Francisco José Vara Hernández, presidente del comité organizador del VII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, que reúne en Salamanca a más de 1.300 especialistas en la materia.

Tras calificar estas unidades de "fundamentales en todos los aspectos", Vara Hernández ha destacado la importancia de un buen sistema de cuidados paliativos, por lo que ha considerado "urgente" que todas las comunidades implanten el suyo propio de acuerdo con las directrices de la Estrategia Nacional aprobada por el Ministerio de Sanidad el pasado año.

Para el presidente del congreso, "todo el mundo tiene derecho a este tipo de cuidados, por lo que no podemos permitir que una persona que lo necesite se quede sin ellos por no poder acceder o por desconocimiento".

Vara ha destacado también la importancia de las unidades domiciliarias, que en este momento atienden al 53 por ciento de los pacientes con enfermedades terminales en España.
Frente a la creencia popular de que la mayor parte de las personas que son atendidas por estas unidades padecen cáncer, Vara ha explicado que en las tres comunidades autónomas más avanzadas en cuidados paliativos prevalecen los enfermos de otras dolencias sobre los oncológicos.

En el marco del congreso, inaugurado hoy, se ha dado una especial relevancia a un aspecto psicológico de los cuidados paliativos: las consecuencias emocionales para el cuidador y sus necesidades insatisfechas.

Según un estudio elaborado por la Asociación contra el Cáncer de Barcelona y presentado en este congreso, uno de cada dos cuidadores presenta niveles altos de ansiedad, y uno de cada cuatro, depresión.

Pero también, un número "muy importante" de estas personas aseguran que la experiencia de cuidar de un enfermo terminal "conlleva aspectos positivos".

Del estudio se desprende además que la necesidad más frecuente para los cuidadores es "saber enfrentarse a los sentimientos de pérdida", junto con la de poder controlar sus emociones y encontrar alguien con quien poder hablar y desahogarse.

En cuanto a las expectativas de eficacia, estas personas suelen sentirse "muy capaces" de cuidar adecuadamente a su familiar enfermo.

La jornada inaugural ha contado con la presencia del consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Francisco Javier Álvarez Guisasola, quien ha advertido de que este congreso abordará hasta el próximo sábado "el aspecto más humano de la Medicina".

© EFE 2008